El 4 de
febrero emprendimos el regreso hacia el Pacifico, concretamente Vanuatu. Esta vez,
decidimos hacer un par de paradas en el camino. Fue muy diferente a nuestra ida
a Argentina que conto con 4 vuelos corridos y un maratónico viaje de 50 horas
sin parar. El retorno lo tomamos con tranquilidad. Buenos Aires a Dubái con
parada sin bajar del avión en Rio y 19 horas más tarde aterrizábamos en Dubái,
Emiratos Árabes. Aquí teníamos planeado pasar dos días y medio (llegamos cerca
de medianoche del martes) antes del vuelo de casi 15 horas a Australia. Después
de hacer las formalidades en aduana y recoger nuestro equipaje nos tomamos un
taxi hacia el hotel que habíamos reservado por internet. Tenía idea más o menos
para donde teníamos que ir porque había estudiado el mapa con antelacion, pero
el taxista parece que no mucho. Tuvo que llamar al hotel dos veces para que lo
ubiquen y finalmente después de casi una hora logramos encontrar el lugar que
resulto estar en las afueras de la ciudad en una zona residencia y cerca de la
Universidad Nacional. Quedamos muy contentos al entrar al departamento porque
era muchísimo más grande de lo que esperábamos y muy nuevo todo. En el hotel
nos dijeron que el edificio era nuevo (2 meses desde la inauguración) y por eso
a los taxistas les resultaba difícil encontrarlo. A la mañana siguiente nos
levantamos y al mirar afuera nos encontramos con esta vista que se ve en la
foto. Al llegar de noche y porque estaba tan oscura toda esta zona nueva no nos
dimos cuenta del desierto que nos rodeaba hasta el día siguiente cuando
corrimos las cortinas.
Al mediodía
(teníamos un poco de jetlag) nos tomamos un taxi al centro para conocer dos iconos
de la ciudad. El primero es el Burj Khalifa y el otro es el complejo de
shopping mall más grande del mundo, el Dubái Mall. Durante el viaje (35 minutos
al centro) el taxi paro a cargar nafta en una de las estaciones de servicio. El
precio de la nafta en Emiratos Árabes? 40 centavos de dólar el litro! (en Vanuatu
estamos pagando más de 2 dólares por litro).
Al salir
de la autopista (5 carriles de cada lado) que lleva a Abu Dabi se toma la
avenida central de la ciudad, Jeque Zayed y esta pasa justo en frente del
complejo de shopping. Ya a unos 20 kilómetros de la ciudad se ve el majestuoso
Burj Khalifa, la estructura más alta del mundo construida por el ser humano,
828 metros de cemento y hierro, inaugurada el 4 de enero de 2010.
El taxi nos
dejó cerca de la entrada al shopping y después de cruzar la avenida nos
encontramos muy cerca de la base del Burj Khalifa y frente a una fuente de increíbles
dimensiones como si fuera un lago gigante pero con agua como de piscina,
transparente. Dejamos la fuente para la noche ya que hay un show de aguas
danzantes y nos metimos en el mall (para ese entonces nos moríamos de hambre)
pero parando un rato para admirar el Burj Khalifa. Es tan grande que al
principio me costo sacra una foto de su total dimensión a pesar de que le
busque los ángulos. Acá dejo unas fotos de la mitad superior y otra de su parte inferior. Después me di cuenta que si me acostaba en el piso podía tomar
mejores fotos. El edificio fue diseñado en la misma forma geométrica de una
flor, la Hymenocallis, de 6 pétalos y color blanco que abundan en
la zona de Emiratos y la India. La base tiene la forma de Y, compuesta de arcos
basados en los domos de la arquitectura islámica.
Qué decir
del shopping mall, para variar, como dije anteriormente, es el shopping más grande
del mundo, 1200 comercios
entre ellos una pista de patinaje, un Kidzania y un acuario, este fue
finalizado en octubre de 2008. También se encuentra el Parque Temático llamado
SEGA Republic, de la compañía Sega. Me detengo en el acuario un momento… y si, es el acuario es el más
grande del mundo, 10 mil millones de litros de agua con un panel de acrílico que
pesa 245,614 kilos, 3 pisos y mas de 33,000 especies de animales marinos. Hasta
hacen cursos de buceo en su interior. Muy bueno, vale la pena pasar un buen
rato mirando los tiburones, rayas y demás animales que nadan en su interior,
incluidos los humanos que hacen buceo (que ganas que le tenia!) Hay también,
alrededor del lago una gran cantidad de edificios muy interesantes, de
arquitectura única.
Esta es la
entrada principal al mall con la vista al centro de la ciudad (la fuente y el
Burj Khalifa están del otro lado del edificio a mis espaldas)
La fuente (un lago diría yo por las dimensiones que tiene) es simplemente
conocida como “la fuente de Dubái”, y para variar, y ya que es Emiratos Árabes,
es la fuente danzante más grande del
mundo (si tiene google earth vale la pena buscarla para apreciar su real dimensión-
25°11'43"N 55°16'32"E) El show
de luces es fantástico, se hace cada 30 minutos desde la puesta del sol hasta
la medianoche y cuenta con 6600 luces de colores y 25 proyectores que bombean
agua a través de 275 metros de manguera y que tienen la capacidad de tirar chorros
de agua a 150 metros de altura. La construcción del lago y todo el resto fue de
una módica suma de 218 millones de dólares, una ganga.
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